El primer paso ya sea para probar un nuevo estilo de dibujo, pintar con otra técnica o escribir un cuento es tomar referencias, investigar o absorver tutoriales cual Bob esponja debajo del mar.
Con los cuentos el primer problema que encontré leyendo cuentos que tenía por ahí fue que casi todos eran «princesa con problemas es salvada de forma absurda por principe que no pinta nada en la historia y solo sale al final» o del tipo que en el fondo intenta enseñar al niño-lector que para portarse bien tiene que estar quietecito y no meterse en lios que si no se lo zampará el lobo.
El segundo problema era el que más problemas daba, básicamente: la mente del niño-lector actual aprende mucho antes ciertos detalles sobre el mundo que le rodea porque ya no se les dice «portate bien o viene el coco» si no «si le das con el palito en el ojo al señor del Atletic te arrancará la cabeza de cuajo de un zarpazo niño».Vamos, que ahora un niño no se cree lo de «y viene el principe y comieron perdices», pero siguen cayendo en los trucos de los magos (o ilusionistas) si encuentran el truco adecuado. Así que encontrar el tema y el lenguaje adecuados es un poco más complicado. Por ahora, voy saliendo del paso con la regla más básica del dibujo, pintura o escritura: si tu no te creerías que podría ser real, es que no sirve.
De todos modos, nunca se sabe si algo va a gustar a otros hasta que otros lo ven así que pronto dejaré una adaptación de un cuento como ejemplo para los que asomáis las narices por aquí.
Mientras, podéis dejar comentarios respondiendo a esta pregunta:
¿Qué te gustaba leer a escondidas cuando tenias 5 o 10 años?